¿Cómo cuidar mis lentes de contacto?

Ya sea porque llevamos mucho tiempo con nuestras lentillas y no nos acordamos de algunos detalles o porque con el paso del tiempo hemos ido cambiando nuestros hábitos, cometemos errores en el cuidado de nuestras lentes de contacto que pueden derivar en enfermedades oculares.

Recordemos que las lentillas son un cuerpo extraño pegado durante muchas horas a nuestra córnea y que durante ese tiempo ejerce un roce y se puede convertir en la puerta de entrada de muchos microorganismos.

A día de hoy, gracias a los nuevos materiales, si mantenemos un buen control de la adaptación por parte de nuestro óptico y cumplimos rigurosamente las normas de uso, el índice de complicaciones por lentes de contacto es mínimo. Entonces, ¿porqué seguimos encontrando patología asociada a su uso día a día? En la mayoría de los casos porque no se ha seguido adecuadamente algunas de las recomendaciones. Recordemos algunas de ellas:

Recomendaciones

  • Lávate bien las manos antes de ponerte, quitarte o manipular las lentes de contacto. Sécatelas bien con una toalla limpia sin pelusas.
  • Después de cada uso, lava bien las lentes con un producto limpiador específico. Frota suavemente con la yema del dedo índice la superficie de la lente, colocándola en la palma de la mano. De esta manera, eliminarás los residuos de cosméticos, contaminantes del aire y secreciones que se hayan podido acumular durante el uso. Evita tocar las lentes con las uñas u objetos afilados.
  • Llena cada compartimento del estuche con líquido limpiador, de manera que este cubra por completo la superficie de la lente.
  • Reemplaza los estuches de las lentes de contacto. En lente de contacto blanda, deberíamos tirarlos cada mes o cada dos meses. Casi todos los líquidos vienen acompañados de un portalentes nuevo, aunque le tengas cariño al tuyo porque te guste más el color o sea más bonito: ¡Reemplázalo!
  • Deshecha en cada uso el líquido del portalentes. Ten en cuenta que la propiedad desinfectante de estos productos es limitada en el tiempo.
  • Respeta siempre la fecha de recambio de tus lentes de contacto. La mayoría de los reemplazos se recomiendan porque el riesgo de infecciones aumenta exponencialmente, da igual que la lentilla siga siendo cómoda y veas bien… ¡Tírala!
  • NUNCA utilices agua. No aclares el estuche portalentes con agua. Tampoco sirve la saliva.
  • No utilices tus lentillas cuando vayas a estar en contacto con agua. Debemos extremar precauciones cuando nos bañemos en ríos, lagos, pantanos y cualquier agua estancada.
  • No utilices lentillas ni liquidos caducados.
  • Ponte las lentes antes de maquillarte y quítatelas antes de desmaquillarte. Ponte las lentes después de utilizar lacas o aerosoles.
  • No duermas con tus lentes de contacto (excepto si son específicas para ello).
  • No utilices lentes de contacto rotas. Si ves alguna rotura en la lentilla, deséchala aunque al ponerla siga siendo cómoda.

Preguntas frecuentes:

  • ¿Por qué veo halos en las luces? En la mayoría de los casos se debe a que la lente de contacto está seca, prueba a parpadear varias veces o utiliza una lágrima artificial sobre la lente de contacto. Si al retirar tus lentes por la noche permanecen los halos, consulta con tu óptico.
  • ¿Es normal que me molesten los ojos al retirar mis lentes de contacto? Probablemente se deba a que la lente de contacto se queda adherida a tu ojo, utiliza lágrima artificial unos minutos antes de retirarla y si no mejora, consulta con tu óptico.
  • ¿Puedo viajar en avión con mis lentillas? Si puedes, pero lo ideal es que en viajes de larga distancia utilices tu gafa graduada.
  • ¿Qué hago si me molestan las lentes de contacto? Retira la LC y límpiala de nuevo. Comprueba si la has puesto del revés. Si no desaparecen las molestias, consulta con tu óptico.
  • ¿Por qué me molestan más las lentillas cuando uso el móvil o el ordenador? Cuando leemos o utilizamos dispositivos electrónicos nuestra frecuencia de parpadeo disminuye. Todos notamos los ojos más secos, pero los usuarios de lentes de contacto aún más.
  • ¿Puedo utilizar lentillas estando embarazada o tras la menopausia? En algunas ocasiones hay que cambiar el material, el reemplazo o el líquido, pero en la mayoría de ocasiones se puede mantener el uso.
  • Si ya tengo unas lentillas con las que estoy genial, ¿tengo que tener una gafa actualizada? Sí. El uso de lentes de contacto está limitado en el tiempo: no puedes utilizarlas todo el día. Si tienes una gafa actualizada te será más sencillo cumplir adecuadamente el tiempo de uso.
  • ¿Qué marca de lentillas es mejor? Obviamente hay materiales mejores y peores, pero el éxito en una adaptación consiste en customizar. Cada persona requiere unos parámetros, un material o un reemplazo determinado. Siempre hay que hacer una adaptación adecuada y seguir las recomendaciones específicas para nuestro ojo, no las que le hagan a otra persona o las que nos encontremos por internet.